Eduardo Galeano - 29. El regreso
Los mejores relatos y frases del libro "La canción de nosotros" de Eduardo Galeano. |
Antes había estado en tu casa, Clara, y te había dicho adiós. Iba a
decirte: no me abandones. Pero te dije adiós. No sabía qué hacer, ni a
quién preguntar. Sólo sabía que no quería meter a nadie más en ese
baile. Estaba solo, Clara, y no quería quemar a los demás en nada que no
fuera la noticia de que Fierro había sido atrapado vivo. Nunca
entendiste por qué, y no creas: yo tampoco. Pero así fue. ¿Para no
hacerte daño? ¿Para no colgarme de tus pies y arrastrarte conmigo? ¿O
por mi antigua y confesada incapacidad de compartir? Me sentía inútil y
culpable. Sé lo que estás pensando. Pero yo no quería invitarte a la
desgracia. ¿Por soberbia? Puede ser. No me defiendo. El hecho es que al
final ya no quedaba ninguna puerta para golpear y yo andaba regalado por
las calles.
Así anduve, no sé, un par de semanas. Después de tantas vueltas, yo
también caí preso. Se veía venir y creo que no hice mucho por evitarlo.
No sé.